sábado, 25 de octubre de 2014

Descubriendo el Yoga. Para desbrozar el camino


Iconografía clásica de Patanjali o Patanjalim


Mircea Eliade, el más importante investigador moderno del Yoga




Descubriendo el Yoga. Para desbrozar el camino

Autor: Marco Antonio Loza Sanjinés

Introducción

El Yoga hoy se parece a una jungla. Sri. K. Pattabhi Jois sostenía que provisoriamente podemos considerar el Yoga como “Upaya” (1), camino. Si así es, hoy, este “camino” se ha llenado de maleza de todo tipo, desde teorías animistas hasta las posiciones espiritualistas más extremas, cuando no de elementales ideas ecologistas, Upaya se ha convertido en vía para las ideas más dispares, ha devenido en un pretexto para creer que el árbol anuncia el bosque, revistas “sobre Yoga” como “Yoga Journal”, nos muestran que toda esta variedad convergía hacia su proliferación mercantil, en las páginas de esa revista se ofrece desde “comida yoga”, hasta implementos para su práctica, así como todo tipo de “yogas”: “yoga fit”, “yoga de la gracia”, “yoga de la risa” (no es broma)…, la lista es interminable. Esta hipermodernidad —seguimos aquí a Gilles Lipovetsky  (2)— es la “era del vacío”, del consumo masificado, de una forma de individualización hedonista, que ha generado una nueva manera de control de los comportamientos y, a la vez, una diversificación incomparable de los modos de vida. Vivimos —dice Lipovetsky— una segunda revolución individualista. No es raro entonces que el Yoga se diversifique sin límites, a gusto de los consumidores.

Mircea Eliade

Proponemos frente a este paisaje lleno de arbustos, desbrozar el camino. Revisando exhaustivamente durante años en la red de redes, nos hemos encontrado con unas cuantas páginas bien escritas sobre Yoga, es la inmensa minoría, se ha dicho muchas veces que uno escribe para sí mismo, creemos firmemente que así es, este blog estará dedicado a retornar a las bases documentales del Yoga, un retorno es una vuelta: no es el mismo el que vuelve, no es al mismo lugar al que se regresa, todo retorno pues, presenta algo nuevo. Se escribe también, finalmente, porque no se halla lo que uno querría leer.
Nuestro retorno al Yoga irá por lo que consideramos la mejor vía, la mejor guía, “La mente debe tratar de alcanzar lo que es mejor.” (Sri. K. Pattabhi Jois) (3). Estudiaremos el trabajo intelectual más importante que hay en occidente sobre Yoga: “El Yoga. Inmortalidad y Libertad” del magnífico filósofo e historiador rumano Mircea Eliade.
Eliade trabajó una tesis doctoral sobre la antropología del Yoga, trasladándose a India, ayudado por una beca, allí encontró al profesor Surendranath Dasgupta (4) que enseñaba sánscrito en la universidad de Calcuta, con su ayuda estudió los textos más importantes sobre Yoga en el idioma original. Mircea Eliade también pasó cierto tiempo practicando yoga en un Ashram de Shivananda en Rishikesh, Himalaya.
Sus textos sobre Yoga son tan completos y rigurosos como lo son los comentarios más tradicionales del Yoga.

Desbrozar el camino

Nuestra intención de retornar a las bases textuales del Yoga no es un propósito que no estuviera ya presente en Mircea Eliade:
“Un valor espiritual —sostiene Eliade— no se adquiere como una nueva marca de automóvil. No se trata, sobre todo, de proponer un sincretismo filosófico, ni una "indianización", y mucho menos ese detestable hibridismo "espiritual" iniciado por la Sociedad Teosófica, y continuado, agravado, por las inumerables pseudomorfosis contemporáneas. El problema es más grave: Lo importante es conocer y comprender un pensamiento que ha ocupado un sitio de primer orden en la historia de la espiritualidad universal.” (5)
Desbrozar el camino quiere decir también confrontarlo al pensamiento serio contemporáneo, por ejemplo en Eliade hay muchas alusiones al Psicoanálisis, que en la época en que realizó sus estudios correspondían al freudiano, más tarde se unió al movimiento de una cierta psicología denominada profunda con Karl Gustav Jung. Nos interesará ampliar las relaciones con el Psicoanálisis y sus desarrollos posteriores que consideramos más cercanos al Yoga, así como a la filosofía occidental como la de Michel Foucault cuando habla sobre “tecnologías del yo”.
En fin, nos proponemos volver a Patanjali, fundador del Yoga, de la mano de Mircea Eliade y visto desde lo mejor del pensamiento occidental.
Este será pues, un acercamiento negativo al Yoga, negativo en el sentido de una “Dialéctica Negativa” a la manera de Theodor Adorno: “Lo diferente no puede ser obtenido inmediatamente como algo a su vez positivo, incluso si para ello se recurre a la negación de lo negativo” (6), despejar el camino es construir un dominio de estudio no un objeto, insertarse en la carencia, proponer un punto de partida no un fundamento, una dialéctica negativa es también una anticipación, es producir otra forma de pensar el yoga, distinta de la que se encuentra actualmente en vigencia. Retorno como descubrimiento,  del latín; “discooperire”, “destapar algo que antes se había tapado o permanecido oculto”.

Notas

(1) Sri. K. Pattabhi Jois. Yoga Mala. (New York: North Point Press, 2003). Pág. 4: “For now, let us say that the meaning of yoga is upaya, which means path, or way which we follow or by means of which we can attain something“.
(2) Gilles Lipovetsky. La Era del Vacío. (Barcelona: Anagrama, 2002)
(3) “The mind should seek to attain what is best.” Yoga Mala. Op. Cit.
(4) Una historia completa de este encuentro y de su amistad se puede leer en:
(5) Mircea Eliade. El Yoga. Inmortalidad y libertad. (México: Fondo de Cultura Económica, 2013). Pág. 13
(6) Theodor W. Adorno. Dialéctica Negativa. (Madrid: Taurus, 1975). Pág. 161